| Exigen revisar decreto ambiental | En el problema de las crecientes acumulaciones de basura en Caracas y el resto del país, existe un punto que tiene una gran incidencia y que sin embargo es muy poco mencionado por los expertos: los efectos negativos que ha traído el Decreto 3.895 de septiembre de 2005 que en su artículo 16 prohíbe la exportación de la fibra secundario producto del reciclaje de papel y cartón.
Los integrantes de la Asociación Reciclaje y Producción Limpia (Arpli) creen que es lamentable que la enorme cantidad de residuos de papel, periódicos y cartones, junto con las chatarras metálicas (cuya exportación también se prohíbe en el mencionado decreto) sean objeto de abandono en vertederos y rellenos sanitarios pues se ha eliminado la posibilidad de que éstos sean reinsertados en el ciclo industrial reciclador nacional o internacional.
Hernán Papaterra, director ejecutivo de Arpli, critica además que las previsiones de la vigente Ley Orgánica de Residuos y Desechos Sólidos sigan en una especie de limbo administrativo pese a que su contenido normativo y utilidad práctica están orientados a reducir los desperdicios a su mínima expresión y a evitar situaciones de riesgo ambientales.
Como ejemplo cita el ar- tículo 5, en donde se establece que la reducción de residuos es una política nacional, así como el reciclaje, pero esto sólo está en el papel, pues en la práctica ninguna autoridad nacional se ha preocupado por reciclar.
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