| Caracas amerita 281 kilómetros de vías expresas para mejorar el tránsito | Para el primer trimestre de este año está previsto que el Ministerio de Obras Públicas y Viviendas termine la ampliación de cinco distribuidores y un tramo de la Autopista Francisco Fajardo, con lo que se pretende mejorar en 30% la movilidad de Caracas. Pero para el ingeniero vial Daniel Quintini, en la capital se necesitan inversiones y obras mucho mayores.
Este mes, el especialista analizará esa necesidad en la reunión de la Sociedad Venezolana de Ingeniería de Transporte y Vialidad. Su trabajo actualiza el Plan Vial Caracas 2000, creado en 1960 por el Ministerio de Obras Públicas. Esa estrategia no se cumplió, por lo que lleva sus proyecciones a 2025.
El estudio indica que se necesitan 281,81 kilómetros de vías expresas, entre las de carácter regional, que enlazan la capital con el entorno; las perimetrales, que circunvalan el área urbana, y las urbanas, localizadas dentro del perímetro de la ciudad. Todas esas inversiones tiene un costo de más de 7,6 millardos de dólares.
--Actualmente se efectúa la ampliación de cinco distribuidores y de parte de la Fajardo. ¿Eso puede mejorar el tránsito? --Evidentemente que no estorba; ayuda. Pero son minipaños calientes. Por ejemplo, en el distribuidor El Ciempiés están ampliando un canal, pero se mantienen los mismos puentes en la Fajardo. Tienen que ensanchar toda la avenida, desde Caricuao a la Boyacá, a cuatro canales por sentido. Eso implica tumbar los puentes actuales de la autopista, como habría que hacer también con la Valle-Coche.
--¿Cuál sería el escenario de la ciudad si se llega a 2025 con las mismas vías? --Cuando se habla de vialidad urbana hay que verla como una red con alternativas para ir de un lado a otro. Cuando uno va hacia Maracay o Valencia ve esas colas para entrar a Caracas porque la única entrada es la Valle-Coche. Por eso es necesario la entrada por Las Adjuntas viniendo de occidente; otra alternativa es el viejo trazado de Tazón-Cortada del Guayabo-Paracotos. Y viniendo del Tuy no se tendría que pasar por Hoyo de la Puerta.
Para eso es útil una carretera de Santa Lucía-El Hatillo, que pueden empalmar con la futura perimetral del sureste.
--¿Cómo se puede financiar la creación de las grandes vías? --Como lo hacen en todas partes del mundo. Sólo que aquí, por el populismo, no se quiere cobrar por los servicios que se prestan. Es usual en todo el mundo un impuesto por la gasolina, que se recaben al menos 0,20 dólares por litro vendido; un pago por tenencia de vehículo, que aquí es irrisorio; y a través de contribuciones por plusvalía, pagados por los propietarios de viviendas y negocios, que se benefician cuando el Estado les construye una vía cercana.
--¿Qué papel juega el transporte público? --Lo ideal es que en esas vías, incluso en las de carácter expreso, pueda haber líneas de autobuses con canales exclusivos. Hay que sustituir las camioneticas por buses grandes, que pueden albergar a los pasajeros de tres minibuses.
-- ¿Qué otras estrategias se deben implantar para disminuir los congestionamientos? --Me parece positivo que una corriente del urbanismo ya no piense en ciudades satélites, que implica moverse de un punto a otro. Ahora se ha vuelto a la idea de que el área de trabajo esté más próxima a la casa, incluso dentro de ella.
Para la futura planeación del urbanismo hay que aprovechar tecnologías como Internet, para disminuir los desplazamientos y reducir el uso de la vialidad.
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