| Salir a trabajar es un riesgo para los que viven en ciudades dormitorio | Volver a casa es un verdadero riesgo para los que trabajan o estudian en Caracas, viven en ciudades dormitorio y se ven obligados a utilizar autobús a diario.
Residentes de Guarenas, Guatire, Los Teques, San Antonio de los Altos y Catia la Mar, entre otras poblaciones satélite, se quejan de que deben sortear el hampa cada vez que salen de casa o regresan a sus hogares.
"A nosotros nos quitaron todo y nos dejaron en interiores en un matorral por Caucagua.
A las mujeres sí las dejaron vestidas", contó uno de los 32 pasajeros que fue víctima de un robo colectivo cuando iba en un autobús que salió de Petare a Guatire el 22 de diciembre pasado. Cuatro hombres que iban como pasajeros tomaron el control de la unidad a punta de pistola, desviaron el bus y les quitaron a sus víctimas hasta los regalos de Navidad que llevaban para sus hijos.
Carteras y paquetes fueron a parar a la camioneta en la que huyeron los delincuentes.
Además de correr el riesgo de que los roben en el camino, usuarios y conductores se quejan de que no hay presencia policial en las paradas, lo que facilita que asalten a los pasajeros mientras hacen la cola y a los choferes cuando cobran el pasaje.
"Después de las 6:00 de la tarde se activan los malandros y mientras uno espera para subir a la unidad hay que estar pilas con los bolsos, porque si no te roban", señaló Ricardo Ruiz mientras esperaba un autobús para ir a Los Teques en la parada de Plaza Venezuela.
"La situación es peor si es viernes, fin de semana o quincena.
Por eso si uno tiene dinero hay que llevarlo bien distribuido", acotó.
Nuevo Circo. Bianca Bermúdez vive en Santa Teresa del Tuy y estudia en la UCV. De lunes a viernes va al terminal de Nuevo Circo a tomar el autobús de regreso a casa. "Hace dos semanas tres muchachos se subieron y nos robaron a todos", contó.
Aunque admite que los vigilantes graban a los viajeros antes de salir, asegura que a veces los choferes dejan subir pasajeros fuera del terminal.
Rafael Bolívar, responsable de la seguridad en el Nuevo Circo, señaló que 25 cámaras graban lo que ocurre en los 8 andenes y las 4 puertas del terminal por el que a diario viajen aproximadamente 38.400 pasajeros en 27 rutas diferentes. "Tenemos aquí 4 meses y desde entonces la seguridad ha mejorado de manera notable", aseguró.
En la avenida Sucre de Catia, de donde salen los buses a La Guaira, los usuarios señalan que hay presencia policial. Los conductores coinciden con los pasajeros, aunque denuncian que no hay seguridad cuando los autobuses arrancan.
"Roban aproximadamente 10 carros a la semana", dijo uno de los choferes que no se identificó por miedo. Y es que tanto transportistas como pasajeros de uno u otro extremo de Caracas no escapan al hampa.
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